Una empresa que obtiene el distintivo de empresa saludable demuestra un compromiso por el bienestar de sus empleados.

 

El distintivo de empresa saludable puede tener un impacto significativo en la competitividad de una empresa al mejorar la imagen de marca, aumentar la motivación y la productividad de los empleados, reducir el absentismo laboral, atraer y retener talentos y reducir los costes de atención médica. Por tanto, una empresa que obtiene un certificado de empresa saludable puede estar mejor posicionada para competir en el mercado y conseguir el éxito a largo plazo.

Mejora la imagen de la empresa: Una empresa que se preocupa por la salud de sus empleados y toma medidas concretas para promover su bienestar puede mejorar su imagen de marca y reputación, lo que puede atraer a clientes y consumidores que valoran la responsabilidad social empresarial.

Aumenta la motivación y la productividad de los empleados: Los empleados que se sienten valorados y cuidados por su empresa suelen ser más motivados y comprometidos, lo que se traduce en un aumento de la productividad y la eficiencia en el trabajo.

Reduce el absentismo laboral: Las empresas que promueven la salud y el bienestar de sus empleados suelen tener tasas más bajas de absentismo laboral, lo que se traduce en una mayor continuidad y estabilidad en el trabajo.

Atrae y retiene talentos: En un mercado laboral competitivo, los empleados valoran cada vez más a las empresas que se preocupan por su bienestar y su desarrollo profesional. Un certificado de empresa saludable puede ayudarle a atraer y retener a los mejores talentos, lo que puede contribuir a la competitividad de la empresa.

Reduce los costes de atención médica: Las empresas que promueven la salud y el bienestar de sus empleados pueden reducir los costes de atención médica asociados con enfermedades relacionadas con el estilo de vida, como la obesidad, la diabetes y la enfermedad cardiovascular . Esto puede tener un impacto positivo en la rentabilidad y competitividad de la empresa.